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    EL EVENTO

    Los grupos ilegales han perfeccionado la creación de empresas fantasma para dar una fachada a sus actividades. En este #DiálogosCONNECTAS analizamos cómo estos esquemas se han convertido en uno de los mayores focos de corrupción en la región.

    Entre el 2014 y el 2018, según el Servicio de Administración Tributaria (SAT) de México, las sociedades o empresas fantasma facturaron más de dos billones de pesos mexicanos con esquemas de corrupción, lavado de dinero y otras actividades ilegales. Tal problemática, que se da también en otros países de América Latina, fue la temática de este #DiálogosCONNECTAS donde expertos en el tema discutieron cómo combatirlo, cómo cubrirlo desde el periodismo y cuáles son los huecos que la ilegalidad aprovecha para crear esquemas de evasión fiscal, peculado, malversación de recursos y lavado de dinero.

    Este panel contó con la participación de la periodista Miriam Ramírez, Coordinadora de programas de la Iniciativa Sinaloa, Daniel Rosas, periodista de la frontera entre México y Estados Unidos, y Daniel Mauricio Rico, experto en criminología y director de la firma C-Analyst. Los panelistas analizaron el rol de las sociedades o empresas fantasma en este tipo de actividades ilegales que trascienden las fronteras nacionales. 

    La conversación virtual se realizó junto al Hub de Periodismo de Investigación de la Frontera Norte, un proyecto del International Center for Journalists en alianza con el Border Center for Journalists and Bloggers, Iniciativa Sinaloa y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID). 


    Pensando en este nuevo foco de corrupción, durante el panel virtual se discutió la falta de seguimiento que hay para estas empresas en los diferentes países de la región latinoamericana, el modus operandi que tienen en la actualidad y ciertos criterios que siguen. Igualmente, se habló acerca de cómo estas compañías son más difíciles de rastrear en municipios o pequeñas ciudades a lo que se suman nuevas formas sofisticadas que han tomado a través del tiempo. 

    De acuerdo a los panelistas, existe un modelo de corrupción que se dedica únicamente a las empresas fantasma o las que son fachada. Estas prestan un servicio en papel, con registros ante las instancias oficiales, pero no están en capacidad de prestar servicios. Así pues, su participación se remite únicamente a emitir facturas, pero la actividad que dicen que están realizando, nunca existirá. Además, este tipo de comercios se pueden encontrar en niveles micro y macro en todos los países, lo que significa que han atravesado toda la institucionalidad.

    Uno de los puntos en común de la charla fue que los gobiernos no están siguiendo de las denuncias que hay con respecto a las empresas fantasma, razón por la cual no hay acciones concretas de vigilancia o sanción. Por su lado, las auditorías no están haciendo bien su trabajo, como explicó el periodista Daniel Rosas, pues el desvío de recursos públicos sigue siendo una constante, por ejemplo en México.

    El panel identificó igualmente las características que suelen tener este tipo de compañías Por ejemplo, que se crean meses después de que entra una nueva administración al gobierno y empiezan a facturar rápidamente mucho dinero. Además, no son conocidas y probablemente, nunca han licitado para el trabajo que ganaron, es decir, si se licita para hacer una carretera, puede que nunca hayan pavimentado una. 

    La periodista Miriam Ramírez explicó que estas empresas tienen en su planta a trabajadores que en la realidad, desconocen que hacen parte de ellas o que firmaron un documento a cambio de un pago, pero realmente no saben que hacen parte de una empresa. Igualmente, las empresas fachada no suelen hacer el trabajo solas, sino que se ayudan entre decenas de otras para encubrir pagos, gastos o para expedir facturas ficticias entre ellas.

    Añadió que sus domicilios suelen ser inexistentes, estar deshabilitados o estar dentro de casas particulares. También es usual que tengan un mismo domicilio, pero quien las opera en realidad son despachos contables. En resumen, se usan variedad de esquemas puesto que es un negocio muy lucrativo. 

    Para Rosas, las empresas fantasmas se pueden encontrar en cualquier lugar y especialmente en sectores económicos que sean grandes y atractivos. Rico agregó que esto es una especialización criminal que es transversal a las instituciones y economía de un país. Al ser un negocio que da tanto dinero, hay criminales que se han especializado en estas empresas y que cada vez las hacen más difíciles de detectar. Así pues, este seguirá siendo un tema al que tanto los gobiernos, como la ciudadanía y el periodismo tendrá que hacerle veeduría, pues solo en conjunto se podrá combatir.

    Sin embargo, el criterio para crear sociedades en América Latina ha cambiado y se ha fortalecido, como lo explicó el experto en criminología, Daniel Mauricio Rico. Según dijo el control efectivo sigue sindo un problema grande en la región, puesto que se pueden constituir compañías dentro de los sistemas legales que cumplan todos los requisitos, pero que opere desde la ilegalidad y que ninguna autoridad vele por esto. Esto se vuelve aún más evidente en los municipios y ciudades pequeñas, pues a nivel estatal y federal existen actualmente más mecanismos de control y es más fácil conseguir información, sin contar que para obtener información específica de ciertas empresas, por ejemplo, un predial, es necesario pagar, por lo que vigilar estas es también un coste que no todos se pueden permitir.

    Actualmente, según Rico, Estados Unidos y Paraguay son los lugares en donde hay más empresas fantasmas, que además son cada vez más sofisticadas y difíciles de detectar. Un ejemplo de esto es que ahora se utilizan aseguradoras que tienen solo un cliente, y el patrimonio solo se hace efectivo si la póliza de cumplimiento se hace efectiva. Encontrar este tipo de movimientos es aún más complejo. 

    Por otro lado, es evidente que las autoridades tienen saturación en sus procesos, por lo que les es imposible hacer seguimiento de todos. Entonces, las empresas fantasma han optado por masificarse y crear operaciones abiertamente ilegales, pero en grandes cantidades que no permite que las autoridades puedan tomar acción inmediata.

    A modo de conclusión, los panelistas coincidieron en la importancia de desnudar las causas estructurales que permiten que en cada país se creen estas empresas fantasma y las razones por las cuáles se imposibilita la persecución de estas. Además, los tres expertos anotaron la importancia que tiene el periodismo para sacar a la superficie estas empresas, pues es una de las formas de hacer veeduría y detectar huecos de los sistemas del control, sobre todo cuando el Estado no tiene la capacidad suficiente para hacerlo.

    Panelistas

     

    Miriam Ramírez

    Periodista especializada en la investigación de corrupción, delincuencia organizada, transparencia, rendición de cuentas y derechos humanos. Es Coordinadora de Programas de Iniciativa Sinaloa y coautora del libro “El Silencio no es opción: Barcelona protege a periodistas de México”, así como de múltiples investigaciones periodísticas para medios internacionales. 

     

    Daniel Mauricio Rico

    Economista, politólogo y candidato a PhD en Crimonología y políticas públicas de la Universidad de Maryland (Estados Unidos). Actualmente es director de la agencia de criminología aplicada C-Analyst y columnista de la revista Semana, y ha sido consultor para el Ministerio de Defensa de Colombia en políticas para enfrentar el tráfico de drogas, lavado de dinero y crimen organizado. 

     

    Daniel Rosas

    Es periodista y editor de la región de Laredo, frontera Norte de México con Estados Unidos, con más de 15 años de experiencia. Trabaja actualmente en los medios El Mañana y Laredo Sun, y ha sido becario de la Universidad Iberoamericana de Prensa y Democracia.

     

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