RESERVA LA FECHA

    DÍAS
    :
    HORAS
    :
    MINUTOS
    :
    SEGUNDOS

    EL EVENTO

    Que la nota de prensa de una ONG salga en los medios puede ser una tarea difícil. Para ahondar en las estrategias que deben seguir organizaciones y periodistas en aras de hacer visible el impacto de las primeras en la sociedad se realizó un nuevo Diálogos CONNECTAS en Bogotá, Colombia.

    Las organizaciones no gubernamentales siempre se han caracterizado por tener investigaciones extensas y bien planteadas, el problema radica en que pocas veces se dan a conocer. A pesar de que las organizaciones se esfuerzan por mostrar sus investigaciones, la brecha entre las organizaciones y medios es muy amplia. Esta brecha tiene dos razones específicas: existe un abismo en la manera en la que se enfocan las investigaciones para presentarlas de una manera atractiva a los medios y además, existe una falta de interés de los medios sobre temas de coyuntura noticiosa.

    El reto de convertir en noticia aquello que las ONGs se esmeran por mostrar fue el centro del debate en este Diálogo CONNECTAS titulado “ONG y periodistas, aliados para una mejor información” hecho en la Universidad Santo Tomás de Bogotá el jueves 27 de septiembre. Ante la necesidad de generar espacios de discusión sobre este tema, Innovación para el Cambio, la Universidad Santo Tomás y CONNECTAS unieron esfuerzos para realizar este foro gratuito.

    Destacadas periodistas y miembros de organizaciones no gubernamentales formaron parte del panel y moderarán el debate, en el que se ahondará en esas estrategias necesarias y efectivas para que tanto periodistas como miembros de las organizaciones identifiquen los aspectos más relevantes que permitirán llevarle al público una mejor información.

    En el foro, las expertas que discutieron fueron por parte de Colombia, Gloria Castrillón, periodista de El Espectador y directora editorial del proyecto Colombia 2020; Diana Jembuel, representante de “Comunidad de Juristas Akubadaura” y periodista indígena del pueblo Misak. Por parte de Argentina, Tatiana Leanza, Coordinadora de Comunicación y Relaciones Institucionales de RACI (Red Argentina para la Cooperación Internacional); y por parte de Bolivia, Verónica Tamayo, coordinadora de comunicaciones de la ONG Unitas. El panel fue moderado por las periodistas colombianas Ana Lucía Duque y Fabiola León.

    Izq a der. Ana Lucía Duque, Gloria Castrillón, Diana Jembuel, Tatiana Leanza, Verónica Tamayo y Fabiola León.

    La brecha entre los periodistas y las ONGs es notoria

    El Diálogos Connectas empezó con la voz de la moderadora Ana Lucía Duque, quien le preguntó directamente a Tatiana Leanza, coordinadora de Comunicación y Relaciones Institucionales de RACI, ¿por qué la brecha entre ONG y periodistas es tan amplia? ¿De dónde nace esa brecha?

    Leanza por su parte, recalcó que esta situación también es común en Argentina, pero que no se da por la desconfianza, sino, según la argentina, porque “si no estamos permanentemente contactando a los periodistas, no se hace un vínculo para que publiquen las notas, realmente es un contacto muy esporádico. Además, se suma el mar de información que reciben los periodistas diariamente, no sabemos como trabajan los periodistas”, contó Tatiana. Por otro lado, Diana Jembuel, periodista indígena, respondió a la misma pregunta con varios puntos “el periodismo es muy lineal, no se usa el lenguaje adecuado y no hay una minga de pensamientos, la educación es muy cuadrada”, explicó.

    “Si no estamos permanentemente contactando a los periodistas, no se hace un vínculo para que publiquen las notas, realmente es un contacto muy esporádico”, Tatiana Leanza

    Para Verónica Tamayo, coordinadora de comunicaciones de la ONG Unitas, la brecha entre las dos partes en Bolivia radica en “la propia autocensura que se ponen las organizaciones. Desde hace años el gobierno ha empezado a tener una relación de confrontación con el tercer sector. Entonces, los medios deciden callar para no mostrarse ante el gobierno”, dijo Tamayo. A esto hay que sumarle que les medios en dicho país priorizan los temas de cultura y no los sociales, “no son tan importantes”, concluyó.

    Asistentes al Diálogos Bogotá

    Con este panorama en frente, ¿qué deben hacer los medios de comunicación para cerrar esa brecha?

    Gloria Castrillón, directora editorial del proyecto Colombia 2020, tomó la voz y explicó que “lastimosamente en los medios compramos el lenguaje que los gobernantes nos imponen” y para Castrillón esto se puede ver muy bien en la construcción paz en Colombia. Además, explicó que “los periodistas quieren todo masticado, no leen un comunicado de prensa bien”, por ende, es necesario “aprender a escuchar el discurso del otro así no esté de acuerdo con él”. Recalcó, enseguida, que los comunicados no son la mejor manera de mostrar historias, “las ONG llegan con un mensaje político y no con una historia”, concluyó.

    “A veces solo se necesita una sentada y un café para encontrar una buena historia periodística en las investigaciones de las ONG”, Gloria Castrillón

    Entonces, ¿dónde está la falla en la falta de comunicación? ¿En la ONG, en los medios de comunicación o en la academia?

    Diana Jembuel, por su parte, explicó que en su caso la inmediatez no es un tema de relevancia para los indígenas, entonces se basan en la formación completa de la noticia y la historia para luego transmitirla. En el caso Boliviano, Tamayo contó que cada persona en Unitas (la ONG para la que trabaja) comparte la información en sus propios perfiles, al ver que los periodistas no publican su información. Sin embargo, han hecho un mapeo para “ubicar a los periodistas que tratan temas concretos, específicos y técnicos de organizaciones sociales”, explicó la comunicadora.

    Por su parte, la moderadora Duque, dijo que las “ONG deberían hacer el esfuerzo de hacer su información atractiva” y frente a esto Castrillón respondió que “a veces llaman al periodista que no es o al medio que no es. Las ONG deben aprender a leer lo que pasa en los medios”. Igualmente, pidió a los periodistas siempre tener una diversidad de fuentes y no recurrir a las mismas, para esto “hay que quitarse el velo de ver más allá de los académicos y ver el valor de los expertos en las ONG. Nosotros debemos tocar la puerta de ellos”, concluyó a manera de respuesta. Tatiana Leanza, estuvo de acuerdo con Castrillon y contó que en el caso argentino los grandes medios solo buscan a las ONG que venden más.

    En contraposición, la boliviana Tamayo culpó a la academia y explicó que “estamos formando periodistas sin un enfoque de agentes de cambio. Hay que dejar de ver las noticias con superficialidad y no siempre es bueno tener una agenda tan extensa en los medios”, concluyó.

    “Hace falta que haya más especialización en los temas periodísticos, y que la investigación sea la base más importante de estas”, Verónica Tamayo

    La resignación no funciona, las acciones concretas llevan a soluciones

    Tamayo cree que es importante ponerle rostro a la noticia y sensibilizar a la audiencia, esto a manera de acción concreta “es un punto de partida”, dijo. Por su parte, Jembuel entiende que lo primero que hay que hacer es “quitarle el miedo a los medios y ser arriesgado con los conocimientos”. Del lado argentino, Leanza explicó que le parecía clave el trabajo en red “muchas organizaciones trabajamos el mismo tema, pero separadas. Si nos uniéramos tendríamos un mayor impacto en los medios de comunicación”, reconoció.

    Por su parte, la coordinadora de Colombia 2020, contó que “la agenda política no se puede poner por delante porque se crea una distancia entre los actores. No se trata de perder la agenda política, pero no hay que ponerla por delante cuando venden sus historias a los medios. Los seres humanos son un objetivo común para trabajar”, contó Castrillón.

    De izq. a der. Gloria Castrillón y Diana Jembuel

    En contraposición y como respuesta a Castrillón, Laenza explicó que en su país se promueven las mesas de diálogo (o mesas multisectoriales) para dar a conocer los temas que tratan las ONG. Mientras que en Bolivia, Tamayo contó que las organizaciones que trabajan con investigación se ven frenadas por el Gobierno, por tanto la canalización de la información y la denuncia de casos sucede únicamente en redes sociales, “los medios tienen cierto interés, pero no nos ayudan con la cobertura necesaria”, relató.

    “No hay un medio de comunicación que no se seduzca ante una buena historia”, decía la moderadora y periodista Ana Lucía Duque a modo de conclusión, “no es imposible encontrar un ángulo, es una trabajo entre los dos”, cerró Castrillón.

    Entonces, a partir de la última intervención, ¿qué propuestas hay para que los temas sean más interesantes para los medios de comunicación?

    “Hay que ponerle rostro a los temas, siempre hay un ser humano vulnerado porque al final esa es la labor de las ONG, cubrir los espacios que el Estado no puede hacer”, respondió Tamayo, coordinadora de comunicaciones de una ONG en Bolivia, “hay que hacer alianzas estratégicas para dar a conocer temas”. Asimismo, la moderadora Duque recomendó “individualizar los temas” y explicó que el “rostro es lo difícil de encontrar”.

    Asistentes al Diálogos Bogotá

    Como respuesta a Duque, Leanza opinó que no siempre es bueno “mostrar las cosas tan explícitamente porque puede victimizar a la figura, no hay que recurrir a esos artilugios para llegar a la prensa”. En esta misma línea, Jembuel habló de la revictimización especialmente en las redes sociales y cree que el proceso de comunicación para no caer en estas vicisitudes

    se trata de constancia en los temas y estudiarlos a fondo, pero mostrarlo con un lenguaje “sencillo y no amarillista”.

    ¿De qué manera funcionan las redes sociales para acercar los temas que una ONG quiere comunicar?

    Jembuel contó que para los indígenas este relacionamiento con las nuevas tecnologías es “muy difícil porque no estamos dados a manejar esta nueva dinámica que es muy rápida. Para los pueblos indígenas todo es más lento, se trata de mirar hacia atrás y hacer memoria antes de hablar. Hay muchos choques con estas dinámicas, pero hay que tratar de incorporarlo respetando la ideología que tenemos”, relató la periodista de los indígenas desde su experiencia en la Comunidad de Juristas Akubadaura.

    La comunicadora argentina reconoció que las redes sociales eran claves para la organizaciones no gubernamentales porque de esta manera, no estaban atados a los grandes medios. Mientras que Tamayo le respondió que desde su experiencia, en Bolivia “las redes han democratizado la información y hay una manera multidireccional de compartir, sin embargo puede ser peligroso cuando se manda un mensaje erróneo”, concluyó.

    ¿Qué creen que se debería mejorar en la academia?

    Según Tamayo, la academia depende del medio en el que se trabaje y “hay que entender que los periodistas están condicionados a las políticas de los medios de comunicación”. Por tanto, la especialización del periodismo debería basarse en la investigación, ya que esto permite más profundidad.

    En cuanto a Leanza, indicó que en su universidad le “enseñaron el ideal y luego vi que los medio de comunicación no seguían estas normas. Nos deben enseñar cuáles son las máximas del periodismo, pero se debe contrastar con la realidad. Hay que especilizarse en algo que te mueva como persona”, recomendó.

    En el caso de Jambuel, explicó desde su experiencia personal, que es necesario “saber hacer memoria de Colombia, no siempre guiarnos por teorías complejas. La memoria social y colectiva debe ser llevada a las aulas, debe haber un análisis profundo y que un relacionamiento con otros pueblos, que empodere y apasione al periodista de ahora”.

    “La memoria social y la memoria colectiva debe ser llevada a las aulas del periodismo en Colombia”, Diana Jembuel

    Por último, Castrillón, quien fue profesora universitaria de periodismo durante muchos años, tuvo una fuerte crítica hacia el periodismo en la academia ya que, “los géneros periodísticos se acabaron en las universidades, entonces, ¿hacia dónde va el periodismo? Muchos se van por el periodismo organizacional porque se lee menos y se gana más. Además, hay una falta de conexión con las realidades del país”.

    ¿Cuál es la función del periodismo en verdad y memoria?

    Las respuestas empezaron con Tatiana Leanza y su experiencia desde Argentina, ella recordó que “no hubo diversidad de voces en mi país cuando se construyó memoria y el relato está incompleto hoy. Todos queremos saber la verdad, lo importante es qué hacemos con ella”, y Tamayo agregó que “la historia es fundamental para visibilizar un futuro esperanzador”.

    En el caso de Colombia 2020, Castrillón contó que ellos “reconstruyen memoria, esto es el momento de hacerlo. Hay ejercicios de memoria como una manera de resistencia para no olvidar y que no se repita. Nuestro énfasis son las historias de territorio y notamos que la gente tenía muchas ganas de hablar y había poca gente que los quería escuchar. ¿Qué van a leer los colombianos en 50 años? La memoria es colectiva y se debe hacer con todas las voces, incluso con las que no estoy de acuerdo”.

    Conclusiones generales

    Diana Jembuel: “Hay muchas verdades, unas van a doler y otras no les van a poner atención. La respuesta a cómo unir los esfuerzos no es solo una labor del periodismo, sino de la sociedad completa. A veces creemos que cada uno tiene la verdad, pero se debe abrir un diálogo intercultural donde la realidad se cuente, no del ahora, sino una verdad más profunda”.

    Gloria Castrillón: “Yo propongo salirse del molde. Salir de un medio de comunicación tradicional es encontrar un esquema tradicional del cubrimiento de fuente, es decir fuentes oficiales. En lugar de cubrir fuentes, hay que cubrir temas, fenómenos, analicen y no se queden solo con un personaje o institución. Cuando se analizan casos hay un mundo a nuestros pies para hacer un periodismo rico y valioso, ahí es cuando podemos ir a buscar otras fuentes para entender temas como las organizaciones no gubernamentales”.

    Tatiana Leanza: “Hay que romper el molde para salir de la inmediatez que muchas veces nos es aliada de la ansiedad y la primicia. Es una ola que nos puede marear a todos, hay que bajar un cambio”.

    Verónica Tamayo: “La autocensura y las trabas del gobierno no permite que las ONG saquen a la luz datos que pueden cambiar la historia de sectores específicos. Desde las organizaciones se debe saber hasta qué punto queremos llegar para sobrevivir o si vamos a morir, cómo lo vamos a hacer. Por eso, desde Unitas buscamos generar alianzas con periodistas, pero no siempre sirven”.

    Este #DiálogosCONNECTAS estuvo enmarcado en el ‘Taller de comunicación para no comunicadores’ impartido por dos talleristas, la periodista Ana Lucía Duque, quien habló sobre como hacer más periodísticas las comunicaciones de las ONG y por la periodista Marjuli Matheus, quien habló sobre comunicación digital dentro de las organizaciones.

    REVIVE LOS EVENTOS ANTERIORES