Martin Baron: “La democracia no puede sobrevivir sin prensa libre”

En un conversatorio en Bogotá moderado por Fidel Cano, director del diario El Espectador y Ana Lucía Duque, editora en CONNECTAS, Martin Baron, exdirector de The Washington Post, compartió reflexiones sobre el liderazgo en un medio de comunicación que enfrenta la presión del gobierno y la imperativa tarea de fiscalizar el poder.

Martin Baron - Periodismo
Fidel Cano, director de El Espectador (I), junto a Martin Baron, exdirector de The Washington Post (C) y Ana Lucía Duque, editora en CONNECTAS (D), durante el foro en el Gimnasio Moderno de Bogotá.

Cuando se habla de periodismo de investigación, emerge como estandarte el nombre de Martin Baron, reconocido periodista y editor estadounidense, quien dejó una huella indeleble durante su destacada trayectoria como director de The Washington Post.

Baron inició su carrera en el Miami Herald, destacándose por liderar equipos de investigación y revelar escándalos locales de relevancia. Su prestigio creció al asumir la dirección editorial en periódicos de renombre como The Boston Globe, donde desempeñó un papel clave en la investigación que expuso los abusos sistemáticos de la Iglesia Católica, historia que inspiró “Spotlight”, ganadora del Oscar a “mejor película” en 2016.

La incansable búsqueda de la verdad y su enfoque en el periodismo de calidad consolidaron su reputación como uno de los principales editores de la industria. 

A propósito de su visita a Bogotá, Colombia, para la cuarta edición de la Cátedra de Editores CONNECTAS, El Espectador y CONNECTAS organizaron un espacio de análisis junto a Baron para abordar la fiscalización del poder por parte de la prensa, los desafíos para mantener la independencia periodística y las formas de continuar el ejercicio riguroso del periodismo en medio de la maquinaria económica.

La conversación exploró cómo la labor del periodismo se puede convertir en un acto de resistencia, destacando los intentos de presión directa de Donald Trump durante su presidencia entre 2017 y 2021.

Baron, quien asumió la dirección del Post en un momento crucial para la transformación del medio, subrayó la complejidad de enfrentar la crisis generada por los ataques abiertos de Trump hacia la prensa. La hostilidad del político republicano no sólo erosionó la confianza en los medios sino que también desencadenó una peligrosa polarización en la sociedad estadounidense.

“Muchas personas creyeron en lo que él estaba diciendo hasta llegar a un momento en que cómo sociedad no nos pusimos de acuerdo sobre los hechos, ni siquiera si algo es un hecho”, dijo.

Los dilemas del editor

La relación de los medios con el poder, en especial en Washington, fue otro de los temas discutidos, a propósito de su recién publicado libro “Collision of Power: Trump, Bezos, and The Washington Post”en el que profundiza en la lucha entre la política, el dinero, los medios y la tecnología.

En la conversación, Baron enfatizó en la importancia de mantener relaciones profesionales, no amistosas, con fuentes políticas para preservar la independencia de la prensa, incluso en situaciones incómodas. “Los periodistas tenemos el deber de fiscalizar a cualquiera que tiene una posición de poder sin importar amistades. En todos los medios en los que he trabajado nuestra lealtad es a la misión periodística. Debemos ser aliados a nuestros principios y no a los políticos ni poderosos”.

Durante su recorrido por The Washington Post, Baron también fue testigo de la compra del periódico por parte de Jeff Bezos, fundador de la tienda virtual Amazon. Pese a este cambio, destacó que, desde su llegada, el magnate garantizó una completa libertad editorial, permitiendo que el Post mantuviera su independencia en la cobertura periodística, incluyendo sus asuntos personales o de Amazon.

“Nunca se retractó de esa promesa”, dijo y aclaró que, de no haberlo hecho así, la credibilidad del Post se habría visto comprometida.

“La prensa no puede sobrevivir sin la democracia y la democracia no puede sobrevivir sin prensa libre”, apuntó.

El exdirector del Post compartió experiencias difíciles, como la publicación de los documentos filtrados por el excontratista de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA, por sus siglas en inglés), Edward Snowden, que revelaron la existencia de programas de vigilancia masiva llevados a cabo por agencias de inteligencia, tanto en los Estados Unidos como en otros países.

En este caso prevaleció el interés común de informar sobre las actividades de vigilancia secretas del gobierno que atentaban contra la privacidad y los derechos civiles de millones de personas, a pesar de los riesgos jurídicos que pudiese enfrentar el medio, explicó Baron, resaltando la importancia de la verificación de información.

Evolución del periodismo en la era digital

En el foro también fue espacio para analizar la transformación de los hábitos de consumo de noticias y los cambios significativos en la era digital. Anteriormente, la mayoría de las personas dependían de periódicos impresos, noticias televisivas o radio para mantenerse informadas. Sin embargo, con la llegada de internet y las redes sociales, la forma en que accedemos a la información ha evolucionado de manera drástica.

Sobre esto, Baron reconoció la importancia de adoptar herramientas tecnológicas y estilos más informales para llegar a audiencias cambiantes. “Siempre va haber disrupción en nuestro campo y abrazar estos cambios es necesario para sobrevivir”

Preguntado sobre la neutralidad de los medios, afirmó que bajo cualquier circunstancia debe sobresalir el principio de objetividad en el periodismo que permita “mantener la mente abierta, escuchar a la gente, buscar la evidencia y hacer una investigación profunda”.

Con estos elementos, “debemos publicar sin vacilar y sin temor”, puntualizó. 

La carrera de Martin Baron es un testimonio de su compromiso inquebrantable con la verdad, la ética periodística y la defensa de la democracia a través de la información veraz. Aunque se retiró del Post en 2021, su legado perdurará como un faro de excelencia periodística y un recordatorio del poder del periodismo comprometido con la responsabilidad y la integridad.

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