El balompié salvadoreño cuenta actualmente con 76 equipos profesionales repartidos en las tres ligas que son reconocidas y avaladas por la Federación Salvadoreña de Fútbol (FESFUT). Cada una de esas ligas es autónoma y cada equipo subsiste como puede y quiere, pero una investigación de EL GRÁFICO revela que varios de ellos funcionan gracias al dinero público que reciben y por el cual no dan cuentas como establece la ley.
Dicha investigación revela que al menos 23 alcaldías municipales a nivel nacional han dedicado, durante los últimos cinco años, un total de US$ 774,321 para financiar a equipos profesionales, pese a que estos aportes económicos se prestan a posibles violaciones de leyes como la Constitución de la República y la Ley del Fondo para el Desarrollo Económico y Social de los Municipios de El Salvador (FODES).
Este periódico, haciendo uso de la Ley de Acceso a la Información Pública (LAIP), envió a inicios de julio 51 peticiones a igual número de alcaldías para conocer si durante el período del último semestre de 2010 al primer semestre de 2015 han brindado ayuda económica a equipos profesionales que representan a su municipio.
En total, 37 cumplieron con la ley y enviaron los datos solicitados, mientras que otras 14 no cumplieron con el plazo establecido en el artículo 71 de la LAIP (diez días hábiles) y hasta este momento siguen sin arrojar datos sobre su relación económica con los equipos de fútbol de la localidad, pese a que los numerales 15 y 17 del artículo 10 de la citada legislación les obliga a extender estos datos.
En cuanto a las alcaldías que sí atendieron las peticiones, EL GRÁFICO también les pidió un detalle sobre el destino que había tenido el dinero que dieron a los equipos profesionales, con copias de los acuerdos y de los recibos respectivos, y aunque no existe una uniformidad en las respuestas, de ellas resultan datos muy llamativos.
Este artículo fue realizado por El Gráfico y es republicado en el marco de la Iniciativa para el Periodismo de Investigación en las Americas del International Center for Journalists, en alianza con CONNECTAS.
Gastos Corrientes
El Ilopaneco, equipo que milita en la tercera división, recibió entre mediados de 2014 y 2015 un total de $46,554, de los cuales ha dedicado $16,201 al pago de viáticos para jugadores.
Estos viáticos, que el alcalde de Ilopango, Salvador Ruano, insiste en no llamarlos salarios, oscilan entre los $15 y los $100 por jugador, mientras que para el entrenador fueron $700 mensuales.
En octubre y noviembre del año pasado EL GRÁFICO reveló que la comuna que dirige Ruano tomó dinero del FODES para invertirlo en el funcionamiento del equipo, violentando el artículo 5 de dicha ley, que solo le permite dedicar ese fondo a obras de servicio e infraestructura. Al respecto la Corte de Cuentas de la República (CCR) realiza un examen especial sobre el caso.
En el Audaz de Apastepeque el destino de los fondos es también muy variado, y van desde el pago de planilla (que creció de $2,080 en 2013 a $12,045 en 2015), hasta pago de arbitraje, compra de alimentos, “gastos varios” y colaboración para jugadores (que ascendieron a $6,000 en diciembre del año pasado).
La mayoría de estos desembolsos son gastos corrientes y contravendrían el correcto manejo del erario público, violentando el artículo 207 de la Constitución, que establece: “Los fondos municipales no se podrán emplear sino en servicios y para provechos de los municipios”.
Incluso, existen antecedentes en el mal manejo de fondos municipales para sostener equipos profesionales, como el caso del extinto Nejapa Fútbol Club y la Alcaldía de Nejapa, donde la Corte de Cuentas de la República, en 2009, dictaminó que se había destinado dinero público al equipo federado de manera ilegal.
El caso repercutió en el alcalde René Canjura, que después de 15 años gobernando ese municipio perdió las elecciones para reelegirse en enero de 2009 y dejó al equipo con una deuda salarial y varios problemas con la nueva administración.
Otros documentos en poder de EL GRÁFICO revelan que las alcaldías en cuestión han apoyado de otras maneras diversas a los equipos, como el pago del entrenador, compra de uniformes, pago de transporte y hasta el pago de inscripción para los torneos profesionales.
Nadie los controla
Aunque la LAIP es una herramienta que en cierta medida permite conocer los desembolsos de las alcaldías a estos equipos profesionales, existe una limitante para determinar si en realidad el dinero se ha ejecutado de la manera correcta.
En El Salvador, los equipos de fútbol profesional están inscritos como Organizaciones No Gubernamentales (ONG), pese a que generan lucro económico, tal como constató un reportaje de La Prensa Gráfica en 2014.
Lo anterior quiere decir que ni la FESFUT, ni las alcaldías, ni los ciudadanos comunes pueden tener certeza sobre sus fuentes de financiamiento. Incluso, no rinden cuentas del dinero público que reciben, pese a que el artículo 41 de la Ley de Asociaciones y Fundaciones Sin Fines de Lucro establece: “Las asociaciones y fundaciones que manejen fondos provenientes del Estado, también estarán fiscalizadas por el Ministerio de Hacienda y la Corte de Cuentas de la República”.
El artículo 25 del Reglamento de la Ley antes citada obliga también a estos equipos/ONG que lleven una “contabilidad formal” y el 27 les da el deber de “presentar balance general y estados financieros”. Sin embargo, ninguno de estos equipos lo hace y muchos de ellos ni siquiera han terminado el proceso respectivo para terminar de inscribirse como asociaciones.
Ana Delmy Mendoza, encargada del Registro de Asociaciones y Fundaciones Sin Fines de Lucro, una dependencia del Ministerio de Gobernación, aseguró a EL GRÁFICO en 2014 que, pese a las legislaciones, ellos no están obligados a fiscalizar a los equipos de fútbol, tanto por falta de recursos como por vacíos de ley.
Los más beneficiados
La investigación de EL GRÁFICO revela que existe un “top cinco” de equipos que abarcan el 64 % de la inversión de las alcaldías municipales.
Dentro de esos cinco que han atraído mayor inversión se encuentra un equipo de primera división, el Santa Tecla Fútbol Club, ligado a la Alcaldía Municipal de Santa Tecla y fundado por personalidades como el ahora vicepresidente de la República, Óscar Ortiz, y el ahora presidente del Instituto Nacional de los Deportes (INDES), Jorge Pérez Quezada. Solo la comuna tecleña le ha inyectado a este equipo durante los últimos cinco años un total de $186,000 (ver nota aparte).
Le sigue el Marte Soyapango de la segunda división profesional, que entre 2010 y 2012 recibió un total de $96,500, aunque el conjunto industrial dejó de recibir ayuda municipal cuando el ahora diputado del FMLN Carlos Ruiz dejó la comuna.
En tercer puesto se ubica el Vendaval de Apopa, que pese a arrastrar algunas carencias y deudas con sus jugadores en los últimos años, ha recibido $86,100 de la Alcaldía de Apopa (ver nota aparte).
En cuarto lugar está el Audaz de Apastepeque, que ha recibido un patrocinio municipal de $72,290 solo entre 2013 y 2015. Cierra la lista de los más privilegiados el Arce Cara Sucia de la tercera división. El equipo de San Francisco Menéndez, Ahuachapán, ha sido patrocinado por la municipalidad con $53,373, a pesar de que está en la liga más baja del balompié salvadoreño.
Estos y otros equipos profesionales del fútbol salvadoreño seguirán sobreviviendo gracias al dinero que le dan las alcaldías municipales y de otros patrocinadores que se unan a la causa.
Santa Tecla, el que más recibe
La alcaldía tecleña ha destinado $186,000 durante los últimos cinco años, más el uso del estadio Las Delicias, donde es local.
DAVID BERNAL
En la Alcaldía Municipal de Santa Tecla el apoyo para el Santa Tecla Fútbol Club no entiende de colores políticos, pues igual se le dio una fuerte cantidad de dinero cuando estaba el FMLN al mando y se le sigue dando el mismo aporte ahora que está ARENA.
En total y durante los últimos cinco años, la comuna destinó $186,000 al equipo de fútbol profesional en concepto de patrocinio, un promedio de $36,000 anuales y $3,000 mensuales, según informó la misma municipalidad a través de su Oficina de Acceso a la Información Pública.
De hecho, el equipo es uno de los tantos que han nacido gracias al patrocinio de una alcaldía municipal. En 2007 el entonces alcalde Óscar Ortiz y otros empresarios tecleños decidieron dar vida a la Asociación Santa Tecla Fútbol Club y compraron una categoría en la segunda división profesional. Cinco años después logró su ascenso deportivo a primera división y en mayo de este año ganó su primer título de campeón en la máxima categoría nacional.
En 2014, EL GRÁFICO publicó una serie de investigaciones en las que reveló que el Santa Tecla Fútbol Club se había beneficiado con el desvío de $125,000 que el presidente del INDES, Jaime Rodríguez, realizó desde el presupuesto para el deporte federado y se dedicó a la construcción de la cancha sintética de Las Delicias.
Además, la Asociación Santa Tecla Fútbol Club no había presentado hasta ese año registros contables, por lo que no se tenía un informe sobre sus ingresos y la ejecución de los fondos públicos que reciben.
EL ALCALDE
El actual alcalde de Santa Tecla, Roberto d’Aubuisson, confirmó que la comuna entrega $3,000 en efectivo al equipo de manera mensual, pero que hay otras cosas con las que ayudan que elevarían el costo de la contribución.
“Hay cosas que no son tangibles. Nosotros les damos la cancha (el estadio Las Delicias), pagamos la luz cuando ellos juegan de noche, asumimos la limpieza de los camerinos, el transporte de aficionados cuando lo piden, concedemos espacios publicitarios que ellos usufructúan. Si sumamos todo eso el Santa Tecla casi recibiría entre $6,000 y $7,000 mensuales”, explicó el alcalde.
D’Aubuisson aclaró que Santa Tecla nunca ha destinado fondos FODES al equipo, solo fondos propios de la comuna, lo cual les estaría permitido según una interpretación auténtica que hizo en abril de este año la Asamblea Legislativa al artículo 4 del Código Municipal, que les permitiría invertir parte de su presupuesto en asociaciones deportivas que “desarrollen sus actividades dentro de la jurisdicción del municipio”.
Cuando se le preguntó el método que ocupan para comprobar la correcta ejecución del dinero que la comuna entregan, el alcalde no dio una respuesta concreta y se limitó a decir que los montos se entregan en concepto de patrocinio “y lógicamente recibimos espacio publicitario en la camisa”.
“El deporte no debe tener color político. Este es un proyecto de ciudad, como lo es el equipo de baloncesto, y próximamente lo será el de béisbol, el de voleibol y el de baloncesto femenino”, expuso.
Aseguró que dentro de su actual concejo municipal hay directivos del Santa Tecla, como muestra de esa unión a favor del proyecto futbolístico.
Apoyo al Vendaval fue como “patrocinio”
MIDES también aportó sumas de dinero a través de la Alcaldía Municipal de Apopa.
ÍTALO HERNÁNDEZ
Elías Hernández, actual alcalde de Apopa, negó que bajo su gestión se aportaran fondos del FODES para el Vendaval, y manifestó que la erogación de dinero que se realizó en la gestión anterior fue a través de un patrocinio de la empresa Manejo Integral de Desechos Sólidos (MIDES), hacia el equipo.
Según el alcalde, su antecesora en el cargo, Luz Estrella Rodríguez, gestionó un patrocinio de MIDES hacia el Vendaval de la segunda división, pero aseguró que no quedaron registros en la alcaldía sobre esas transacciones económicas.
Ese aporte económico, canalizado a través de la alcaldía, comenzó en 2010 y finalizó en 2013. Hubo desembolsos de $35,000 en 2010; de $45,000 en 2011; para 2012 se redujo a $1,000 y el último pago, en 2013, fue de $5,100.
“Eso fue en el tiempo de la gestión anterior, ellos así lo manejaron. Hablaré de 2012 para acá (período anterior), y de 2015, primer año de mi nuevo período, de antes no, porque le correspondió a la pasada gestión. (Ellos) ni me dejaron nada, no me dijeron que continúe con el Vendaval”, aseveró.
Ese patrocinio de MIDES desapareció cuando llegó Hernández a la comuna. Sin embargo, la alcaldía apoyó al equipo en 2012, año que estuvieron en mala racha de resultados y en crisis económica. “Lo tomé porque había muchos jugadores sin sueldo, sacamos una partida porque le preguntamos a los de la Corte (de Cuentas de la República) cómo darles ayuda como parte de la alcaldía. Se sacó (dinero) a través de un acuerdo municipal una ayuda (en 2012), la Corte nos explicó el modo de hacerlo”, explicó.
Añadió que tras ese aporte “no les hemos vuelto apoyar económicamente, pero sí lo hacemos logísticamente”. La alcaldía colabora con el préstamo de la cancha del estadio Joaquín Gutiérrez, pago de transporte y el pago de arbitraje. Además, la municipalidad asumió la remodelación del Gutiérrez. “Pidieron la remodelación de camerino y cancha en buen estado para el arranque del nuevo torneo, todo lo cumplimos cuando lo solicitaron. Cuando tomé la municipalidad la cancha estaba arruinada pero comenzamos a trabajar, la engramamos porque nos la cerrarían”, agregó.
Hernández señaló: “La gestión anterior desviaba el dinero para los jugadores; yo no lo he hecho así, porque con MIDES no he tenido acercamiento desde mi llegada”.
NO DEL FODES
Según el alcalde, los recursos destinados al equipo no salieron del FODES: “Gracias a Dios he tenido mucho cuidado en eso, sé que sería un reparo seguro de la Corte de Cuentas contra mí”.
Además, señaló que ningún concejal de la alcaldía forma parte de la actual directiva del equipo apopense: “Todos están fuera de eso al igual del nuevo equipo que se ha formado, el AD Apopa. Esa es una asociación integrada por gente del municipio y empleados que apoyan: empleados y no concejales”.
El alcalde expuso que el Vendaval se manejó afín al partido político del cual formó parte la gestión anterior, el FMLN. “Lo que sucede con ellos es que revuelven lo político con lo deportivo. Hay una cuestión de ética deportiva, siento que el deporte no debe estar polarizado”, concluyó sobre el tema.
Dueño del oro, en liga de bronce
El Arce Cara Sucia es el equipo de la tercera división que más dinero ha recibido de una alcaldía desde 2010: $53,372.
ERNESTO ARTEAGA
La cancha Puente Arce es probablemente el escenario más fronterizo con el que cuenta El Salvador. Solo unos cuantos metros al occidente está el río Paz, frontera entre El Salvador y Guatemala. Detrás de una de sus metas, un día cualquiera sin partido, una vaca aprovecha la vegetación para alimentarse.
Esa es la cancha del Arce Cara Sucia, el equipo de tercera división que más recursos ha recibido de su gobierno municipal, el de San Francisco Menéndez, en los últimos cinco años: un total de $53,372.82 desde enero de 2010, según el informe dado por la misma administración.
Una cifra mayor incluso que algunos conjuntos de segunda categoría, nivel donde en teoría los gastos son mayores.
“Desde 2006 que estamos acá en la alcaldía siempre hemos apoyado a este equipo. Les hemos venido apoyando con un presupuesto donde les dábamos $800 al equipo mensualmente, cuando era Juventud Cara Sucia, y les dábamos el transporte, les pagábamos un entrenador y todo eso. Ahora que lo trasladamos al Puente Arce le hemos estado dando el apoyo con el transporte y con un presupuesto económico igual, solamente que ya este año, en esta temporada, tenemos un convenio con ellos y les estamos apoyando con $2,000 mensuales”, cuenta Narciso Ramírez, alcalde municipal de San Francisco Menéndez.
PATROCINADORES
El mismo Ramírez dio las coordenadas para conocer la cancha Puente Arce: llegar justo a la entrada a las oficinas de aduana de la frontera de La Hachadura y tomar la calle a la derecha, avanzar algunas cuadras hasta encontrarse a la izquierda con el campo.
Se llega a una cancha modesta, cubierta alrededor con malla ciclón, con algunos graderíos que lucen nombres de políticos escritos con los colores del partido GANA. Eso a pesar de que la municipalidad que le da dinero está al mando desde 2006 de un hombre que pertenece a ARENA desde 2010 y que antes fue parte del PDC.
“Patrocinado por Miguel Perdomo”, dice un rótulo en el área que vendría a ser el sector de palco. Según una nota de La Prensa Gráfica en 2011, él fue candidato a alcalde por GANA y estuvo detenido acusado del delito de estafa.
Uno de los directivos del Arce Cara Sucia es Rafael Edgardo Calderón López, juez de Paz de ese municipio y presidente de la tercera división profesional.
De 2011 a 2014 él firmó recibos del dinero que la alcaldía daba para cancelar salarios de los jugadores, según documentos proporcionados por las autoridades municipales.
Calderón también fue miembro del comité ejecutivo de la FESFUT en el período que lideró Carlos Méndez, de 2010 a 2014.
Ramírez dice que sí se usan fondos FODES para el equipo de tercera, pero lo justifica así: “Tenemos un presupuesto del 25 % que es para deportes también, es un 25 % de administración, de pago de planillas y lo utilizamos para apoyar el deporte. Hay otro 75 % del FODES que es para infraestructura”.
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