El resultado del pasado Plebiscito para decidir la aplicación de los Acuerdos de Paz en Colombia, el pasado 2 de octubre, que terminó con apenas un 50 por ciento por el “No” frente a poco más de un 49 por ciento por el “Sí” dejo al gobierno colombiano atrapado entre encontrar una fórmula jurídica para rescatar lo que ya se firmó, y una fórmula política para lograr mayor respaldo a su propuesta. En este último plano las intrigas, incertidumbres e inesperados movimientos hacen que lo que vive el país suramericano recuerde la popular serie House of Cards.
Por un lado Rodrigo Londoño alias “Timochenko”, principal comandante guerrillero de las FARC-EP, ha sido tímido sobre la posibilidad de renegociar como tuiteó el 5 de octubre:
Con los del SI, los del NO y las mayorías que no votaron esperamos encontrarnos pronto para que nos acompañen a implementar lo acordado https://t.co/6bTUIOZ260
— Timoleón Jiménez (@Timochenko_FARC) 6 de octubre de 2016
Para el gobierno Santos no es fácil esta opción pues de muchas maneras antes del plebiscito dijeron antes que era “imposible” renegociar el acuerdo. Humberto de la Calle, el principal jefe negociador por parte del Gobierno lo manifestó de esa manera en una entrevista con el periódico español El País, publicada el pasado 1 de octubre. “Lo acordado es lo mejor que se pudo lograr. Con sus críticas, lo que da certidumbre a Colombia es el acuerdo. El llamado a renegociar es un llamado a la incertidumbre”.
Pero esta es la fórmula que ha buscado en los primeros acercamientos con el sector político que capitalizó el “No” cuyo máximo representante es el expresidente y actual senador colombiano, Álvaro Uribe Velez. A partir de acá que lo que tendría que haber sido una decisión ciudadana se tiñó con la de las mezquindades de la política.
De otro lado Uribe no ha sido claro sobre su propuesta de paz con las Farc. Primero manifestó que no formaría parte de una mesa tripartita.
Nosotros NO pretendemos asumir facultades exclusivas del Gobierno.Expresaremos los puntos y esperamos q Gobierno introduzca los correctivos
— Álvaro Uribe Vélez (@AlvaroUribeVel) 4 de octubre de 2016
Luego, el mismo día, que sí:
Vamos a participar en negociación.Vamos a repetirle al Gobierno nuestras preocupaciones para que ojalá hagan los correctivos @WRadioColombia
— Álvaro Uribe Vélez (@AlvaroUribeVel) 4 de octubre de 2016
Y recibió fuertes críticas cuando desde el Congreso planteó propuestas que en muchos sectores de la opinión, ya están incluidas en los acuerdos.
Dos días antes de esos tweets, la revista Semana publicó una nota bajo el titular “Los presidenciables que catapulta la victoria del No”. Semana dijo que “Aunque en el plebiscito estaba en juego exclusivamente la refrendación del acuerdo de paz, nadie duda que se convirtió en la antesala del debate presidencial del 2018”. Otros medios de comunicación identificaron como próximos presidenciables – bajo el ala protectora de Uribe – a los negociadores que el senador colombiano ha designado como sus representantes.
Más allá de eso, Uribe y su grupo capitalizó los resultados como una victoria personal desplazando la discusión de los Acuerdos a puntos que ni siquiera están considerados dentro de estos, como “los valores de familia”, como lo publicó La Silla Vacía, y como él mismo lo declaró a su salida del Palacio de Nariño tras un encuentro de más de cinco horas con el presidente Juan Manuel Santos.
En redes sociales, la entrada al juego de Uribe y el también expresidente Andrés Pastrana – que hizo una fuerte campaña por el No – ha sido motivo de chanza entre los colombianos que ven en ello una clara intención política:
Uribe y Pastrana salen mañana de la Casa de Nariño con:
— Eccehomo Setrina (@EccehomoSetrina) 4 de octubre de 2016
Mientras las reuniones avanzan, el diálogo por la ratificación o no de los acuerdos miles de personas que respaldan el “Si” se lanzaron a las calles a manifestar su respaldo.
Por su parte el “No” tuvo un duro revés en la opinión pública tras las declaraciones del gerente de campaña de esa opción, Juan Carlos Vélez, quien declaró que su estrategia para conseguir respaldos fue “tergiversar mensajes” y “dejar de explicar los acuerdos”, según lo publicó el periódico El Tiempo.
“El No ha sido la campaña más barata y más efectiva de la historia”: gerente de la campaña del No https://t.co/4tTtz7o0q1 pic.twitter.com/PwYyq1snFo
— Diario La República (@larepublica_co) 6 de octubre de 2016
No pasó desapercibida la primera reacción de Uribe… Que al final desautorizó a quien ha sido uno de sus más importantes protegidos políticos..
Hacen daño los compañeros que no cuidan las comunicaciones
— Álvaro Uribe Vélez (@AlvaroUribeVel) 6 de octubre de 2016
Al opaco camino de la solución política se le suman las fórmulas para destrabar lo jurídico. Las propuestas van desde repetir las elecciones en las zonas que el día de la votación fueron afectadas por las lluvias por el paso del Huracán Mathew. Así lo planteó el senador colombiano Armando Benedetti que tuiteó el 6 de octubre:
La Corte Constitucional tiene que revisar de oficio y automáticamente la convocatoria y realización del plebiscito
— Armando Benedetti (@AABenedetti) 6 de octubre de 2016
Hasta convocar una Asamblea Nacional Constituyente, que pareciera ser una de las fórmulas que más atrae a las Farc.
Si Uribe se bajó del bus de la Constituyente, Chao, que le vaya bien. Ella es el camino para adecuar las instituciones a los retos de la paz
— Iván Márquez (@IvanMarquezFARC) 5 de octubre de 2016
Un panorama confuso, con muchos movimientos que se desató tras la incertidumbre de los resultados de los colombianos, y cuya realidad está cambiando con cada hora que pasa.
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— Connectas.org (@ConnectasOrg) 6 de octubre de 2016