El presidente Iván Duque designó a Junco como director de la Dian en febrero de 2021. Foto: Presidencia de la República de Colombia

Las facturas a nombre del director de la DIAN

Según Pandora Papers, el actual director de la DIAN, Lisandro Junco Riveira, creó una sociedad en Delaware. Tendría también una cuenta en Chipre y una oficina virtual en Londres gestionadas a través de un proveedor con sede en Dubái. Según Junco, la sociedad que constituyó en 2016 la trasladó a la Florida, es pública y solo tiene una cuenta con ahorros para estudiar en Miami.

Por: Alianza editorial El Espectador-CONNECTAS

C on 39 años, Lisandro Junco Riveira es el director más joven que ha tenido la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales de Colombia (DIAN). En su meteórica carrera, este abogado de la Universidad de la Sabana orientó su actividad profesional hacia el derecho internacional y el tributario. Eso explica por qué fue delegado del gobierno colombiano ante la OCDE en el proyecto BEPS (Base Erosion Profit Shifting), iniciativa creada para desestimular el uso de prácticas fiscales abusivas, a través de la implementación de reglas claras de tributación internacional.

Llegó a la DIAN en 2013 como subdirector de Control Cambiario y después fue subdirector de Fiscalización Internacional. Su ascenso en la DIAN tuvo una pausa en 2016, pues fue nombrado director de Impuestos Distritales de Bogotá. Durante ese año, el abogado Lisandro Junco constituyó con su esposa la empresa Cyber Security System Company en Delaware, Estados Unidos, como lo ratificaron los documentos revelados en Pandora Papers por el International Consortium of Investigative Journalists – ICIJ, y analizados en Colombia por la alianza periodística de El Espectador y CONNECTAS.

Según Junco, su plan era ir a Estados Unidos para realizar una maestría en  tributación transnacional “para aprender y luchar contra eso”. Y, a la par, trabajar allá junto a su esposa. De hecho, la pareja constituyó una empresa en ese país para evitar la doble tributación. “Si yo recibía un peso, tenía que pagar un peso en Estados Unidos y un peso en Colombia. ¿Qué se hace? Se establece una sociedad, la que iría a tributar (…) Porque si Lisandro Junco llegaba a Miami y recibía ingresos por asesoría jurídica, asesoría en seguridad, revisión de documentos, tenía que tributar en Colombia por los ingresos que obtuve en Miami. Por eso creamos un residente, una corporación no adquirida”, explicó Junco.

De acuerdo con los registros públicos de Delaware, la empresa Cyber Security System Company Subsidiary Florida EE. UU. L.L.C. fue constituida el 8 de septiembre de 2016, sin acceso a los nombres de quienes la constituyeron. Entre los pocos detalles que ofrecen los documentos en esta jurisdicción, está la información tributaria. Según este registro, emitido en junio de 2021, la compañía fue cancelada por “falta de pago de impuestos”, con una deuda de 1.770 dólares. Lisandro Junco lo niega y aporta unos soportes para mostrar que ha pagado 300 dólares anuales de impuestos desde 2017.

«Si yo recibía un peso, tenía que pagar un peso en EE. UU. y uno en Colombia. ¿Qué se hace? Se establece una sociedad, la que iría a tributar»

Lisandro Junco, director general de la DIAN

Junco puntualiza que, a los pocos días de constituir la empresa Cyber Security System Company Subsidiary Florida EE. UU. L.L.C en Delaware, la trasladó a Florida, donde planeaba estudiar, así que el registro no tiene por qué estar en Delaware. Esta alianza periodística no encontró registro de la sociedad en Florida, Junco dice que puede ser porque nunca ha operado y muestra documentos donde aparece un número tributario con dirección en ese estado y resalta que la cuenta bancaria que tiene la firma en el Citibank tiene incluso su dirección de Colombia.

“Con los controles que tienen los bancos en Estados Unidos, y más sobre los colombianos, si hubiera algo irregular esto no sería posible”, añade. Según el actual director de la DIAN, quien realizó todo el proceso de constitución de la firma y posterior traslado fue Alex Hlavacek, de Apex Resident Agent Services LLC, persona a la que llegó por recomendación de la directora de la maestría de la Universidad de Miami. En efecto, esta firma es la que aparece en Delaware como agente residente de la firma que constituyeron Junco y su esposa.

La alianza El Espectador – CONNECTAS contactó a Patricia Brown, directora del programa de postgrado en tributación de la University of Miami School of Law entre 2010 y 2020, con el propósito de corroborar la información suministrada por Lisandro Junco, en el sentido de que fue ella quien le recomendó a la empresa Apex para el referido trámite. “No puedo comentar sobre ninguna interacción con estudiantes. Sin embargo, puedo decir que no conozco a nadie llamado Alex Hlavacek y ciertamente nunca lo he recomendado a él o a Apex Corporate Services (del que tampoco tengo conocimiento) a nadie”.

“Nosotros los contactamos (a Apex) para saber cómo se debía constituir una sociedad en Estados Unidos y él (Alex Hlavacek) nos dijo que todos constituían sociedades en Delaware y las traían a la Florida”, explicó Junco. “Yo no me fui a Delaware. Yo me fui donde Alex, yo llegué a la oficina de él y me invitó a un café Starbucks que queda como a dos casas de ahí”. Efectivamente, el certificado que Lisandro Junco mostró a la alianza periodística El Espectador-CONNECTAS aparece firmado por Alex Hlavacek. El documento fue certificado por un notario en Florida.

Sin embargo, el documento mostrado por Junco de la empresa Cyber Security System Company Subsidiary Florida EE. UU. L.L.C. tiene la misma fecha de constitución de la sociedad en Delaware y no queda claro que la firma Apex Resident Agent Services haya gestionado el traslado de la sociedad de Lisandro Junco y su esposa al estado en el que planeaban radicarse. Lisandro Junco afirma que una vez se creó y trasladó la empresa, no volvió a saber del citado Alex Hlavacek y en la actualidad no sabe cómo contactarlo.

Esta alianza periodística logró comunicación telefónica con Apex Corporate Services, específicamente con alguien que se identificó como Alex Hlavacek. El interlocutor manifestó que la sociedad de Lisandro Junco Riveira no era cliente suyo desde 2019, cuando está registrado el último pago anual que asegura haber recibido de su parte. Y aclaró que no tenía registros de traslado de esta sociedad del estado de Delaware al de Florida. Además, resaltó: “nunca he estado en un Starbucks en Florida”. En respuesta, Junco sólo anota: “es su palabra frente a la mía”.

“Delaware o Florida, lo importante es que ninguno de los dos es considerado paraíso fiscal ni por Colombia ni por la OCDE”, recalca el director de la DIAN. Según las declaraciones de impuestos que permitió ver Junco, la sociedad ha pagado impuestos en Estados Unidos y, tanto él como su esposa, han declarado en Colombia los activos de la compañía en el exterior, que corresponden a un poco más de 10 mil dólares de ahorros familiares en el Citibank de Miami, como le permitió ver en los estados financieros del banco a periodistas de esta alianza editorial.  “Es una sociedad onshore, no offshore”, recalca el director de la DIAN. Es decir, que la actividad  de la empresa es en el país donde se constituyó.

Sin embargo, según Pandora Papers, su nombre y el de su sociedad en Estados Unidos también aparecen como clientes de SFM Corporate Services. Una firma creada en Suiza en 2006, pero con sede en Dubái, cuya mayoría de clientes son europeos, africanos o del Medio Oriente. Entre ellos, personajes de trayectorias cuestionables, como un traficante de armas italiano, un ministro de Zambia acusado de corrupción o un comediante francés condenado por discursos de odio y defensa del terrorismo, entre otros.

Al ser contactado por el consorcio internacional de periodistas de investigación ICIJ, un vocero de SFM Corporate Services aseguró que la firma “sigue un estricto proceso Know Your Client (KYC) y debida diligencia antes de incorporar a los clientes, de acuerdo con las leyes de las jurisdicciones en las que opera. En los 15 años que SFM ha estado operando, ni la empresa ni sus empleados/directores han enfrentado acusaciones legales”. Por su parte, el representante de APEX Corporate Services, no confirmó ni descartó que haya trabajado con SFM, “trabajo con muchas firmas de abogados”, resaltó.

Entre los servicios que ofrece SFM Corporate Services está la creación de empresas o la apertura de cuentas bancarias y oficinas virtuales, es decir, contestar el teléfono y gestionar correos en jurisdicciones como Seychelles, Islas Caimán, Gibraltar, Chipre, Florida, Delaware, Samoa, Singapur, Panamá y Hong Kong, entre otras. En su página web recomiendan a Suiza, pues gracias a su eficiencia fiscal es “lo más cercano a la seguridad”. En el caso de Cyber Security System Company, antes de su creación en Delaware, SFM Corporate Services le cobró 520 dólares por una “oficina virtual estándar” en Londres. El negocio quedó registrado a través de la factura #4085 del 25 de agosto de 2016.

En otra factura, la reseñada como #2016-05880 del 12 de octubre de 2016, la empresa SFM Corporate Services cobró a Cyber Security System de Lisandro Junco, 1.020 dólares por servicios en la jurisdicción de Delaware, como la asignación de un director nominal, un accionista nominal -nombre que aparece en los documentos públicos, aunque sin poder real-, trámites de notarización y apostilla, entre otros. El 17 de ese mismo octubre de 2016, en la factura #2016-05954, quedó registrado un tercer cobro de 420 dólares a Lisandro Junco por concepto de una cuenta bancaria en Chipre.

El director de la DIAN dice que nunca ha oído el nombre de SFM Corporate Services y de paso niega rotundamente haber adquirido a través de esta empresa una cuenta en Chipre y la apertura de una oficina virtual en Londres. “Una oficina virtual no sé qué es. Sé cómo operan las empresas de economía virtual. Por ejemplo, un Netflix con un intangible en Irlanda. ¿Yo qué intangible tengo? No tengo ningún intangible”, precisó Junco. Consultada la firma SFM sobre Junco, respondió que “está sujeta a estrictas obligaciones contractuales de confidencialidad con respecto a sus clientes”.

Lisandro Junco insiste en que no encuentra explicación para que su nombre aparezca en facturas de SFM, y sugiere que pudo ser víctima de un esquema de facturación fraudulenta que él se dedica a perseguir. Asegura que si hay alguien que ha luchado contra la evasión internacional es él. Si bien tiene soportes de pagos de impuestos, tanto en Estados Unidos como en Colombia, no tiene copia de los documentos mencionados en el certificado de autenticidad de Cyber Security System Company Subsidiary Florida EE. UU. L.L.C. Junco sintetiza que el custodio es Alex Hlavacek de Apex Resident Agent Services LLC, y con él ya no tiene contacto. “Todo eso se hizo allá en la Florida, todo eso lo radicó él. Yo recibí esto (el certificado) a vuelta de correo”.

 
 
 
 
 

«Créame que con el conocimiento que tengo del tema, si quisiera hacer algo irregular, no lo haría en Estados Unidos»

Lisandro Junco

Otro de los hallazgos de Pandora Papers tiene que ver con un cobro por la apertura de una cuenta bancaria en Miami y un número EIN -identificación que necesitan las entidades comerciales para el impuesto federal en Estados Unidos-. Esta transacción quedó fechada en junio 13 de 2017, dos meses antes de que, según Lisandro Junco, él abrió la cuenta de su sociedad, con apenas 40 dólares.  También aparecen cobros anuales entre 2017 y 2020, que suman cerca de 6 mil dólares, por la renovación de la empresa en Delaware, no en Florida, como refiere Junco. Algunos de estos cobros fueron en euros.

El cobro más abultado en estas facturas es por concepto de “provisión de la dirección registrada y el agente en la jurisdicción del estado de Delaware para cumplir con la regla de presencia mínima local. Tasas oficiales, tasas de registro pagaderas al gobierno del estado de Delaware”. También haría parte del servicio cobrado por SFM Corporate Services por un director nominal, un accionista nominal y la renovación del poder para el abogado. Según estas facturas, Junco habría pagado dos mil dólares anuales en promedio por mantener una empresa “inoperativa” que no tiene sino un poco más de diez mil dólares en la cuenta. “Créanme que con el conocimiento que tengo del tema, si quisiera hacer algo irregular, no lo haría en Estados Unidos”, concluye Junco.