Antigua está sufriendo importantes inundaciones debido al paso de fenómenos meteorológicos, como la tormenta tropical Eta. Esta isla de baja altitud siempre ha sido proclive a inundarse, pero la destrucción del medio ambiente—como la causada por la construcción de una Zona Económica Especial—puede hacer que eventos como este sean todavía más destructivos. Antigua y Barbuda cuenta con leyes para evitar la alteración indiscriminada de barreras naturales, pero esta investigación muestra cómo es que su aplicación se ha visto comprometida por la promesa de prosperidad económica para este país.
Hace 5 años, el gobierno de Antigua y Barbuda firmó un contrato con el desarrollador chino Yida Zhang para crear una Zona Económica Especial
La zona de más de 2,000 acres incluye a las islas adyacentes: las islas de Crump, Guiana, Rabbit y Maiden
Los pobladores han expresado sus preocupaciones por el medio ambiente marino, ya que los planes del desarrollador implican la construcción de hoteles, fábricas y la introducción de pesca de alta mar en un área nacional protegida: el Área Administrativa Marina del Noreste de Antigua (NEMMA, por sus siglas en inglés)
Aunque en general el gobierno parece apegarse a las reglas, esta investigación muestra cómo es que la dureza en la aplicación de la ley varía cuando se trata de facilitar la construcción de la Zona Económica Especial. Además, se demuestra cómo es que el desarrollador ha violado múltiples leyes del país al, por ejemplo, empezar a construir sin permiso, al remover manglares, realizando minería ilegal de piedra caliza o de arena en la costa de Maiden Island.