La caja negra llamada
Sembrando Vida

La opacidad y discrecionalidad que siembran dudas en el programa estrella del gobierno federal para el campo mexicano.

Por: Lidia Arista, Montserrat Peralta y Ariadna Ortega
Coordinación: Mariel Ibarra

En casi tres años de operación, el gobierno mexicano ha destinado 72,434 millones de pesos al programa Sembrando Vida, que es vendido como el más importante en materia de reforestación e inclusión social de los últimos años y con el que promete sacar del rezago a las comunidades más pobres del campo.

Sin embargo, el programa no está exento de irregularidades: las denuncias por malos manejos se investigan con lentitud y por ahora con nulos resultados, mientras que a los sembradores los amonestan con facilidad y, en algunos casos, los expulsan de manera discrecional. Pocos son los campesinos que se atreven a cuestionar o denunciar por miedo a ser dados de baja.

Esta situación, aunada a la opacidad con la que se guardan más de 4,200 millones de pesos en ahorros de los más de 426,000 beneficiarios del programa, ponen en duda los resultados de la iniciativa.

Expansión y CONNECTAS, con el apoyo del International Center for Journalists (ICFJ) dentro del programa ARCO, realizaron peticiones de información, hablaron con una veintena de productores y operadores del programa y visitaron comunidades y viveros donde pudieron constatar que es muy poca información que tienen los sembradores sobre el manejo de sus ahorros y que el programa opera con discrecionalidad.